
TECNICAS DE CASTIGO DE LOS PECHOS FEMENINOS
Pasamos el alimento haciendo una pequeña charla, dirigida por mí. Tuve mucho cuidado de no dejar que la conversación se desviase cara lo que había planeado para él. Deseaba que creyera que relevarlo de su dinero era todo cuanto podía imaginar. ¡Decir ah!