¿Qué decir de mí? Puesto que soy una mujer presumida y coqueta, soy habitual a las peluquerías, a las tiendas de ropa, al maquillaje, a pintarme las uñas … pero eso sí, soy una amante entregada y lo que desea es hacerte pasar unos momentos imborrables.

Hola mi nombre es Miranda, soy una colombiana sensual, apasionada, excitante e instintiva, que disfruta de cada instante. Te propongo un encuentro íntimo lleno de fogosos besos, intensas caricias y motivaciones candentes, seguidas por un acto agradable, a tu gusto, estoy deseosa por complacerte.

Esta revisión no garantiza que siempre y en todo momento serán compatibles en cuanto a sus motivaciones. Mas sí va a darles la ocasión de reconocer esos cambios que pueden transformarse en un elemento tóxico para la relación cuando no están reconocidos.

A veces, para poder despreciar, precisamos destruir, pero, en la mayor parte de los casos, nos puede bastar con quitarles méritos, con criticar a esa persona, desvalorizarla, localizar excusas intelectuales puede ser por servirnos de un ejemplo moralistas para poder quitarle valor a su logro o éxito.

O sea, esta CRISIS DE LA MEDIANA EDAD se manifiesta asimismo en hombres física­mente enérgicos y cronológicamente jóvenes, a veces de solo 35 años de edad (o poco más). Es preciso enfatizar mucho este punto.

Estaba enferma y agotada con la gripe y ella todavía tenía que follarme. No voy a decir que ella era egocéntrica, pero el hecho de que sentí que me moría era claramente menos importante que recibiera algo de polla.

Suehiro Maruo. Maruo, natural de Nagasaki en 1956, puede ser considerado heredero de la técnica artística de Yoshitoshi. En sus obras, las deformaciones óseas, los defectos de nacimiento, los desmembramientos y las mutilaciones tienen un estrellato muy marcado.,

Ya había anochecido cuando llegaron al centro del enorme parque. Se trataba de un lugar donde casi no se escuchaba el estruendos del tráfico furioso, al lado de un riachuelo con un sauce quejica. Entonces El Sabio dijo.

Cuando tu atención se desvía de lo que tratas de notar es la habilidad que te va a ayudar a detener la actividad de espectador, por el hecho de que aprenderás a apreciarlo cuando observes y después redirigirás la atención a las sensaciones de tu cuerpo.

En esos instantes no sé explicar qué pasó por mi mente y menos por mi cuerpo, sentí como si hubiesen abierto el grifo de mi sexo y se hubiera cerrado mi capacidad de pensamiento. En ese instante me pinchan y no sangro, supongo que se me quedó una cara de idiota, no reaccionaba, hasta que…